50 ANIVERSARIO DE FUNDACIÓN, COLEGIO SALESIANO DE CD. OBREGÓN, SON., MÉXICO. Y Fiesta Provincial de
Con gran alegría nuestra Provincia Mater Ecclesiae valora los frutos alcanzados a través de la Misión Educativa en el Colegio Salesiano de Ciudad Obregón, Sonora, que el pasado sábado 22 de febrero ha celebrado el 50 Aniversario de la llegada de las Hijas de María Auxiliadora a esta ciudad que, asentada en el Valle del Yaqui, se caracteriza por su gente sencilla, entusiasta y muy cercana a la Familia Salesiana.
Sor Antonia García (Directora), Sor Ernestina Carreón, Sor Higinia Valdez y Sor Guadalupe Torres, fueron las primeras hermanas destinadas por la Divina Providencia para fundar esta Obra no obstante las limitantes del intenso calor que se dejaba sentir, la falta de luz, de pavimentación y demás pobrezas que marcan siempre los orígenes de una fundación. Y fue así que, el 8 de septiembre de 1969, se dieron los primeros pasos que abrieron el camino de un horizonte cuya única visión fue la de formar generaciones de “buenos cristianos y honestos ciudadanos”.
El Colegio quedó ubicado en una de las áreas más necesitadas, tanto material como espiritualmente, ya que en el mismo territorio estaba ubicada la “zona de tolerancia”. Gracias a la presencia de las hermanas, esta parte de la ciudad ha mejorado mucho cultural, social y espiritualmente. Los exalumnos y padres de familia se caracterizan por una profunda devoción a María Auxiliadora.
Los festejos del 50ª Aniversario iniciaron con una solemne Eucaristía en la iglesia Catedral la cual fue presidida por el Exmo. Mons. Felipe Padilla Cardona y concelebrada por el Padre Gerardo Gómez SDB, P. Flavio Leal Robles, sacerdote diocesano y los sacerdotes redentoristas Leonardo Moctezuma Mora y Jorge Carlos Espinosa Urcelay.
Entre los presentes: alumnos, exalumnos, Padres de Familia, Educadores, Bienhechores y amigos de esta Obra, se destacó la presencia de la Provincial S. Leonor Guadalupe Salazar, las hermanas del Consejo y Equipo Provincial, así como las Directoras de todas las Comunidades Educativas de la Provincia.
Fue también significativa la presencia de hermanas que animaron esta Obra en el servicio de Directoras Generales; su encuentro con exalumnas y exalumnos de las diversas generaciones y sus familias, fue conmovedor.
Con el pan y el vino, en el ofertorio se presentaron al Señor obsequios alusivos a los inicios de la Obra como son las semillas, flores y frutos, signos del crecimiento fatigoso y la alegría de los frutos cosechados en tantas generaciones de buenos cristianos y honestos ciudadanos.
Más tarde se ofreció una comida de gala en donde los invitados de honor fueron los bienhechores, educadores, exalumnos y padres de familia que han colaborado en el desarrollo institucional del Colegio Salesiano a lo largo de los años. Momento importante fue la entrega de reconocimientos a personalidades distinguidas que han favorecido la consolidación de esta obra. Además, se inauguró la construcción de un techo en el patio central del colegio, develándose una placa conmemorativa y cortando el listón la Provincial, Sor Leonor Guadalupe Salazar García y la bienhechora Sra. Beatriz Marina Bours Muñoz quien a través de la Asociación “Tichi Muñoz” apoyó económicamente para la realización de este sueño.
Por la tarde se llevó a cabo el evento artístico que fue preparado con mucho esmero y presentado con una especial alegría juvenil a través de una obra musical que narra el trayecto educativo a lo largo de los años.
Papel esencial fue la presentación de la noble figura de la Sra. Ana María García de Ruiz , exalumna del Colegio Dante Alighieri, de México Tacubaya, quien por el gran aprecio que tenía a las Hijas de María Auxiliadora pidió que fueran enviadas a Cd. Obregón, y con heroico esfuerzo, haciéndose ayudar de grandes bienhechoras, empezó la construcción del nuevo Colegio y de la casa para las hermanas. Fueron años de grandes trabajos y fatigas a fin de ofrecer una educación católica de calidad a los niños y adolescentes del lugar. Aunque en ese momento todos los colegios de las hermanas estaban dedicados a la educación de las niñas, a petición de los bienhechores, desde su inicio fue este un colegio mixto.
En la fiesta se dedicaron algunas melodías a las hermanas, pero se elogió especialmente la labor pastoral de Sor Teresita Domínguez quien atendía el Oratorio Juvenil, y que entre los jóvenes era llamada tiernamente “Sor Tenis”. Esta hermana, con su testimonio alegre, el acompañamiento y “la palabrita al oído”, logró convertir a muchos jóvenes liberándolos de las adicciones, las malas costumbres y el sin sentido de la vida.
La Comunidad Educativa, a través de cantos, bailes y expresiones artísticas, hizo patente el profundo gozo de pertenecer a la Familia Salesiana y el constatar que –como en la experiencia de Don Bosco- María Auxiliadora “lo ha hecho todo”. La fiesta dejó en todos, resonancias de alegría, fraternidad, gratitud y compromiso por continuar haciendo camino en la Misión Educativa Salesiana de esta Obra.
Aprovechando la presencia de las Animadoras, durante los días 23 y 24, se llevaron adelante las reuniones en las que se compartieron experiencias a nivel provincial o local y se tomaron acuerdos para continuar el camino trazado en la Planeación Provincial.
Agradecemos a la comunidad actual formada por Sor Isabel Muñiz (Directora), Sor Inés Reyes y Sor María Santos Ravelero, el gran cariño con el que animaron y organizaron la realización de esta importante celebración. Un gracias especial también a los miembros de la Comunidad Educativa que con muchos detalles y atenciones hicieron visible el Espíritu de Familia que nos caracteriza como Salesianos.
¡María Auxiliadora seguirá manifestando fuertemente su presencia y el Señor multiplicará las bendiciones para esta bella Obra!